Diez pueblos de Costa de Morte imprescindibles para una escapada

Diez pueblos de Costa de Morte imprescindibles para una escapada

La belleza salvaje de este lugar supone todo un misterio para muchos y un destino ideal para los más aventureros.

No es la primera vez que os hablamos de Costa da Morte y sus preciosos entornos. La belleza salvaje de este lugar supone todo un misterio para muchos y un destino ideal para los más aventureros. Si bien os dijimos algunos de los puntos más interesantes que ver en la Costa da Morte, ahora llega el momento de hacer un repaso un poco más detallado a los pueblos de Costa da Morte más bellos.


Fisterre


Nuestra presentación no sigue un orden específico, a pesar de que sí comienza con gran fuerza. Se presenta como el lugar en el que los antiguos romanos consideraban que se encontraba el Fin del mundo, un punto repleto de peligros y donde solo aquellos de gran valor se aventuraban a visitar.


Actualmente se presenta como uno de los puntos más occidentales de Europa y donde acaba la aventura para muchos peregrinos tras realizar el Camino de Santiago. De hecho, son muchos los que se acercan hasta el Cabo Fisterra y su faro para poder colgar las botas y, desde ahí, contemplar la belleza del entorno.


En lo que respecta al pueblo, no solo destaca por sus leyendas, sino por su pueblo como la típica villa marinera. En esta los turistas encuentran estrechas calles que descienden al mar, un paseo por el puerto y una de las playas de Costa da Morte más hermosas.


Carnota


Seguimos con algunos de los puntos más llamativos del lugar. Se sitúa entre la Costa da Morte y la Ría da Estrela, por lo que goza de una situación muy privilegiada. Pero no solo eso, sino que destaca por tener uno de los arenales más conocidos de Galicia por su gran belleza y extensión: la Playa de Carnota.


Cee


Su nombre resulta cuanto menos llamativo y no es de extrañar. Su origen viene del término latino “cetus” que significa “cetáceo”. ¿Por qué este nombre tan peculiar? Fue bautizado de este modo debido a las antiguas factorías de cetáceos y, aunque a día de hoy puede no ser uno de los más famosos, su bello paseo parítimo provoca que llame la atención de aquellos que deseen visitarlo.


Ézaro


Su nombre puede resultar conocido y es que, a todos aquellos que se les habla de Dumbría, no pueden evitar pensar en la parroquia que linda con el mar. De hecho, el gran protagonista en este pueblo es, nada más y nada menos, que el Río Xallas, el cual lo atraviesa en su totalidad y que nos presenta una de las imágenes más bellas con la Fervenza do Ézaro desembocando en el mar.
Camariñas


Siguiendo con los tramos costeros más espectaculares, no podemos pasar por alto Camariñas. Este pueblo destaca por su famoso encaje de bolillos, aunque también por ser el lugar en el que tuvo gran presencia el artista alemán Man. Actualmente podemos encontrar un museo dedicado a este artista que tanto amó este lugar y que se trata de una visita obligada junto al Cementerio de los Ingleses, lugar donde descansan las víctimas de uno de los mayores naufragios de la zona.


Muxía


Para aquellos amantes de las leyendas y las curiosidades del pasado, Muxía es uno de los pueblos más destacados de Costa da Morte. Después de todo, se presenta como un escenario mágico donde se sitúan la mayor parte de los ritos de origen celta relacionados con mar, sol y piedras. Aquí se encuentran puntos de interés como el Santuario da Virxe da Barca.


Corcubión


Como bien puedes suponer, los pueblos más bonitos de Costa da Morte tenían como gran papel ser pueblos pesqueros. Esta es nuevamente la propuesta que se presentaba con Corcubión, el cual fue declarado como Conjunto Histórico Artístico por la gran riqueza de su patrimonio. En este no solo encontaremos la pesca, sino que disfrutaremos de grandes propuestas como el Palacio de Altamira e incluso el Castillo do Cardenal. Una escapada de gran importancia, sobre todo si queremos hacer una visita a una de las playas más resguardadas: Quenxe.


Laxe 


Situado en Bergantiños, Laxe vive de la agricultura y, por supuesto, de la pesca. Lo mejor es que esta cuenta con una de las playas que, a pesar de los actos de los humanos, se ha convertido en un punto muy destacado e importante al presentarnos la Playa de los Cristales. Por supuesto, no podemos olvidarnos del Faro de Laxe, uno de los más bellos del lugar.


Malpica


Algunos de los pueblos con más encanto no cuentan con un diseño detrás, sino que las casas han ido situándose donde cada uno deseaba, creando estructuras caóticas pero igualmente bellas. Esta propuesta se encuentra precisamente en Malpica, uno de los pueblos más bonitos debido a su caos y que presenta uno de los puertos más acogedores. Su autenticidad y belleza dejan una marca en el corazón y, debido a ello, es uno de los destinos más inolvidables.


Vimianzo


Terminanos nuestro repaso a los pueblos ideales para una escapada con Vimianzo, uno de los que más destaca a pesar de no tratarse de un pueblo de costa. En este encontraremos una gran riqueza patrimonial y una gran historia gracias a sus dólmenes. Pero, por supuesto, será la oportunidad ideal para que los aventureros y soñadores echen un vistazo a su imponente castillo, el cual fue construido entre los siglos XIII y XV y que a día de hoy se ha convertido en un gran referente en la zona.